Las recomendaciones generales que nos dan los profesionales sanitarios, sea cual sea nuestra edad, sexo, o incluso estado de salud, siempre son las de alejarnos del tabaco, alcohol y consumo de drogas. Al hábito de consumo o adicción de cualquiera de ellos, se le conoce como hábito tóxico.
Son bien conocidos sus efectos nocivos tanto en personas sanas como en personas que ya padecen de base una enfermedad. En el caso de las personas con psoriasis y artritis psoriásica hay estudios que demuestran el efecto negativo en la evolución de dichas enfermedades, es decir, en el empeoramiento de las placas cutáneas y el aumento de la inflamación de las articulaciones afectadas. Así mismo, también se ha observado la disminución de la efectividad de los tratamientos específicos para la psoriasis y artritis psoriásica y la aparición o aumento de efectos secundarios de dichos tratamientos.
Tabaco: Los tóxicos que contienen los cigarrillos, además de ser causantes de la liberación de radicales libres, también lo son de sustancias inflamatorias responsables del empeoramiento de las placas y articulaciones.